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San Lorenzo Cacaotepec cierra uno de los periodos municipales más cuestionados de su historia. Vecinos y actores de la sociedad civil denuncian que la administración encabezada por la presidenta municipal Iris López Zavaleta y su cabildo operó un esquema sistemático de corrupción alrededor del Ramo 33, manejando los recursos públicos como si se tratara de patrimonio personal y dejando fuera a las constructoras locales, pese a que varios habitantes cuentan con empresas formales para ejecutar obra pública.
A pesar de la imagen cuidadosamente construida que Iris López Zavaleta promueve en medios como Revista Mujeres Shaíque, donde se le presenta como una funcionaria guiada por “el amor, la empatía y la escucha”, la realidad administrativa de su gestión exhibe un contraste abrumador.
Mientras su retrato aparece en portadas de revistas financiadas con recursos de comunicación social, en el municipio persisten denuncias por opacidad, favoritismos y un uso discrecional del presupuesto. Para diversos habitantes, no es menor que se destinen montos significativos a la promoción personal mientras las obras públicas se ejecutan sin transparencia y sin beneficio directo para la comunidad. La distancia entre la funcionaria que posa frente al mural y la autoridad que manejó el municipio con discrecionalidad es demasiado grande como para ignorarla.
Según testimonios, todas las mezclas de recursos municipales y estatales fueron ejecutadas como “administración directa”, un mecanismo que permitió concentrar el control absoluto en el regidor de obras, el arquitecto Levy Galván Díaz, y en su asesor técnico, identificado como el arquitecto Eduardo, originario del Istmo. Entre ambos, señalan los habitantes, definieron proyectos, costos, materiales, proveedores, mano de obra y, sobre todo, manejaron los sobreprecios.
La operación fue tan evidente que, de acuerdo con las denuncias, el asesor técnico recibió cerca de 500 mil pesos al año solo por la supuesta asesoría, mientras que la mano de obra contratada ni siquiera fue de #SanLorenzo #Cacaotepec, sino de San Francisco Telixtlahuaca, quienes también habrían construido la casa particular del regidor de obras bajo instrucciones del asesor técnico, utilizando recursos y personal vinculados al ayuntamiento.
Un negocio redondo: pavimentación a precio inflado
Una de las obras más señaladas es la pavimentación de la entrada al municipio, recientemente inaugurada, con un costo reportado de 8 millones de pesos:
• 5 millones del Gobierno del Estado
• 3 millones del municipio
Expertos aseguran que la magnitud del proyecto, aproximadamente 400 metros de pavimento, no justifica un costo tan elevado. “Esa obra no pasa de 4 millones”, señalan habitantes y constructores que conocen precios reales de materiales y mano de obra.
El resto, afirman, se perdió en las mismas manos de siempre.
Mayordomías con dinero del pueblo
A las acusaciones de corrupción en obra pública se suma otra práctica indignante: varios integrantes del cabildo habrían utilizado recursos municipales para financiar mayordomías y eventos personales bajo la figura de “apoyo comunitario”. La presidenta municipal, denuncian, culmina su gestión pagando su mayordomía con dinero del pueblo, en un cierre que habitantes describen como “pan y circo”.
Advertencia para el nuevo cabildo
Las y los ciudadanos señalan también que el regidor de obras y su asesor técnico tendrían acuerdos en nuevas construcciones de hospitales en la región, razón por la cual exigen vigilancia extrema a la nueva administración: ¿Qué beneficios tendrá realmente el pueblo?, ¿A quiénes favorecerán los contratos?, ¿Se repetirá el mismo esquema de enriquecimiento personal?
San Lorenzo Cacaotepec concluye así un periodo marcado por el saqueo, la soberbia y el cinismo, y la comunidad espera que el próximo cabildo rompa con esta dinámica y ponga por delante el interés colectivo que durante tres años fue ignorado. #Oaxacasus8regiones #Oaxaca #Noticias #corrupción


