Floriberto Santos
Timoteo, un niño de 11 años de edad, murió al ser atropellado por una camioneta en Santa Lucía del Camino, Oaxaca; el chofer y la unidad de motor fueron asegurados.
La desgracia ocurrió poco antes de las 15:00 horas de ayer, sobre avenida Lázaro Cárdenas, Camino Nacional.
La historia
Según las primeras versiones, Timoteo y sus abuelos, procedentes de Santiago Textitlán, Sola de Vega, llegaron a la capital para visitar a un familiar que se encuentra hospitalizado en esta zona.
Dicen que después de la visita, encaminaron hacia la parada de los autobuses o algún otro tipo de transporte que los llevaría a la Central de Abasto.
Supuestamente, Timoteo se acordó que había dejado su bote de agua en la clínica, por lo cual se desprendió de las manos de su abuela y atravesó la calle para regresar por el bote.
“Párate, Párate” le gritaron los adultos, pero fue demasiado tarde.
Según testimonios de algunos curiosos, difundidos en redes sociales, un taxi alcanzó primeramente el pequeño cuerpo y enseguida lo trituró una camioneta, color blanco, la cual iba repleta de maíz.
Metros adelante la camioneta detuvo su marcha, mientras los abuelos corrieron hacia el cuerpo ensangrentado del menor.
Testigos llamaron de inmediato a policías y a socorristas, acudiendo, al instante, paramédicos de la Cruz Roja, quienes confirmaron que el pequeño había fallecido.
Personal policiaco de vialidad acordonó el área, mientras arribaban elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) y peritos de la Fiscalía General del Estado (FGEO) para el inicio de las investigaciones.
